Abogados en Mostoles

La elección de su abogado en Móstoles dependerá en primer lugar de la naturaleza de su caso.

Primero, determine si necesita:

• Asesoramiento legal
• Acompañamiento a través de los tribunales.
• En efecto, algunos abogados están especializados en el asesoramiento, mientras que otros se ofrecen para defenderle en caso de litigios o disputas.

A continuación, considere si su caso requiere o no la intervención de un especialista.

Hay dos tipos de abogados:

• Abogados generalistas
• Abogados especializados en Móstoles, que ejercen en una área concreta dentro del inmenso mundo del Derecho

Por lo tanto, si busca un abogado para un procedimiento de divorcio, un expediente relativo al derecho laboral o al derecho inmobiliario, puede acudir a un abogado generalista. El médico de cabecera suele acompañar a sus pacientes a lo largo de su vida para asesorarles o para atender sus necesidades específicas cuando se encuentran con un problema más concreto.

No obstante, si su caso depende de un área de especialización muy específica o es particularmente complejo, se recomienda encarecidamente elegir un abogado especialista, ya que está familiarizado con el tema y los procedimientos en cuestión.

Si el abogado con el que usted se pone en contacto no es competente en el área del derecho para la que usted lo ha solicitado, se asegurará de señalárselo. Si es así, pídale al abogado que le recomiende a uno de sus colegas o ve al colegio de abogados de su localidad para encontrar al abogado que mejor le pueda ayudar

Menos concreto, pero igual de importante, el primer contacto con su abogado es un indicador muy importante de la calidad de su trabajo. Un buen abogado debe tener un papel educativo para que usted sea consciente de lo que está en juego en su caso.

Por lo tanto, esté atento al comportamiento del abogado hacia usted durante la primera reunión para saber si está tomando la decisión correcta:

• ¿Explica claramente lo que implica el manejo de su caso?
• ¿Le hace preguntas para entender completamente sus necesidades?
• ¿Presta atención a lo que le dice?
• ¿Parece tener una buena comprensión del tema?
• Además, la disponibilidad del abogado es también un criterio importante: debe mantenerle informado de la evolución del caso y responder a sus peticiones. En cuanto empiece a hacerse cargo de su caso, pregunte al abogado sobre como prefiere que se comunique con usted para evitar sorpresas desagradables.

Sin embargo, es importante confiar en su abogado y no entrar en pánico si no le responde inmediatamente. Además, el tiempo empleado en el llamadas normalmente no se factura, al igual que el tiempo empleado en consulta, según las condiciones especificadas en el acuerdo de honorarios.

Los honorarios, que varían mucho de un abogado a otro, no son necesariamente representativos de la calidad del trabajo del especialista. En efecto, la remuneración del abogado depende de muchos factores como sus condiciones de trabajo (tamaño del bufete, presencia de asistentes…), su reputación, su experiencia, pero también de la dificultad de su caso y de su situación financiera.

Un buen abogado le informará desde la primera cita sobre sus honorarios de la práctica  y lo que incluyen precisamente (gastos de viaje, honorarios de expertos…). Toda esta información debe ser formalizada en un acuerdo de honorarios. Este documento es obligatorio desde el año 2015 y sirve como contrato entre usted y el abogado.

Como los honorarios de un abogado no están regulados, es libre de aplicar las tarifas que desee. De la misma manera, usted el libre de no aceptarlos y de elegir un abogado que cobre más o menos dentro de su presupuesto.

Si no tiene medios para pagar los honorarios del abogado, debe saber que existe una asistencia jurídica que puede hacerse cargo de una parte o de la totalidad de los honorarios. Por lo general, esta ayuda financiera sólo está disponible para las personas con ingresos más bajos y bajo ciertas condiciones. Sin embargo, la asistencia jurídica no es aceptada por todos los abogados. Por lo tanto, es importante tener en cuenta este factor a la hora de elegir un abogado, si es que tiene derecho a ello.

Por último, la reputación del abogado puede ser un criterio muy importante en su elección. Sin embargo, es importante ser objetivo con respecto a los recursos de que dispone.

Es común que un litigante recurra a un abogado porque se lo han recomendado. Antes de recurrir al asesoramiento del abogado, asegúrese de que es competente para manejar su caso y que los honorarios son apropiados para usted.

Además, la visibilidad del abogado en Internet es un fuerte indicador de confianza. De hecho, la mayoría de los abogados tienen un sitio web, un blog o pueden ser referidos en un sitio dedicado o directorio. De esta manera, podrá obtener información y comparar los abogados que correspondan a sus necesidades. Además, se puede encontrar mucha información en Internet (honorarios, asistencia jurídica, áreas de intervención…), lo que le ahorrará la molestia de ponerse en contacto con el abogado para averiguar estos elementos.